En general, un empresario busca en sus abogados:
- Conocimiento profundo del derecho: Que sean expertos en las áreas legales que afectan a su negocio, como contratos, propiedad intelectual, laboral, fiscal, etc.
- Proactividad: Que no solo respondan a las consultas, sino que anticipen problemas y ofrezcan soluciones preventivas.
- Orientación al negocio: Que comprendan los objetivos comerciales de la empresa y asesoren en consecuencia, buscando siempre el mejor resultado para el negocio.
- Confidencialidad: Que manejen con absoluta discreción la información confidencial de la empresa.
- Disponibilidad: Que estén disponibles para atender las necesidades del empresario de manera oportuna y eficiente.
- Relación de confianza: Que se establezca una relación de confianza basada en la honestidad y la transparencia.
Además de estas cualidades generales, algunos empresarios pueden tener aspiraciones más específicas, como:
- Acompañamiento en el crecimiento de la empresa: Que los abogados sean socios estratégicos en el crecimiento y desarrollo del negocio.
- Representación en negociaciones: Que los abogados representen a la empresa en negociaciones complejas con clientes, proveedores o competidores.
- Defensa en litigios: Que los abogados defiendan los intereses de la empresa en caso de litigios.
- Asesoramiento en transacciones: Que los abogados asesoren en la estructuración y ejecución de transacciones comerciales, como fusiones, adquisiciones o inversiones.
CUANDO LO CONSIGUES TE SIENTES BIEN
En resumen, un empresario busca en sus abogados un aliado estratégico que le permita tomar decisiones informadas y proteger los intereses de su negocio.
¿Te gustaría profundizar en algún aspecto en particular? Por ejemplo, podríamos hablar sobre cómo elegir al abogado adecuado, cómo establecer una buena relación con tu abogado o cómo evaluar el desempeño de tu equipo legal.También puedes compartirme tu situación específica para que pueda brindarte una respuesta más personalizada.
